"...Nosotros, los corazones, nos morimos de miedo sólo de pensar en los amores que partieron para siempre, en los momentos que podrían haber sido buenos y que no lo fueron, en los tesoros que podrían haber sido descubiertos y se quedaron para siempre escondidos en la arena. Porque cuando esto sucede, terminamos sufriendo mucho."
(Paulo Coelho)
jueves, 17 de septiembre de 2009
martes, 15 de septiembre de 2009
sábado, 12 de septiembre de 2009
viernes, 11 de septiembre de 2009
jueves, 10 de septiembre de 2009
¿Nos conocemos?
El corría, nunca le enseñaron a andar, se fué tras luces pálidas. Ella huía de espejismos y horas de más. La miel en los labios, las piernas enterradas. Aunque esta vez quizás será mejor marcharse. Nunca saber dónde puedes terminar...o empezar, jugar al azar. Y voy a pensar que todo va bien,
todo va bien, todo va bien. A veces no soy yo, busco un disfraz mejor, bailando hasta el apagón. Cuadrar el círculo de esta obsesión, asumir que rendirse no es una opción, saber que no os puedo aniquilar, no es suficiente para firmar la paz. El valor para marcharse, el miedo a llegar. No hay principio ni final.
Intenta no respirar.
Hablemos de ruina y espina, hablemos de polvo y herida, de mi miedo a las alturas, lo que quieras pero hablemos. De todo menos del tiempo que se escurre entre los dedos. Maldita dulzura la nuestra. Solo quedamos los buenos, nadie nos enseña donde parar.
Protégeme del riesgo,
Protégeme del cuerpo,
Protégeme del tiempo
Protégeme del mundo.
No olvido los sueños, vuelvo a lo que no acabó,
no perdí, no perdí. ¡Disculpad mi osadía!
un año menos que dolerse de esta herida y de esta luz.
todo va bien, todo va bien. A veces no soy yo, busco un disfraz mejor, bailando hasta el apagón. Cuadrar el círculo de esta obsesión, asumir que rendirse no es una opción, saber que no os puedo aniquilar, no es suficiente para firmar la paz. El valor para marcharse, el miedo a llegar. No hay principio ni final.
Intenta no respirar.
Hablemos de ruina y espina, hablemos de polvo y herida, de mi miedo a las alturas, lo que quieras pero hablemos. De todo menos del tiempo que se escurre entre los dedos. Maldita dulzura la nuestra. Solo quedamos los buenos, nadie nos enseña donde parar.
Protégeme del riesgo,
Protégeme del cuerpo,
Protégeme del tiempo
Protégeme del mundo.
No olvido los sueños, vuelvo a lo que no acabó,
no perdí, no perdí. ¡Disculpad mi osadía!
un año menos que dolerse de esta herida y de esta luz.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)